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A Project of The Annenberg Public Policy Center
SciCheck’s COVID-19/Vaccination Project

Personal y trabajadores médicos temporales de FEMA deben acatar mandatos de vacunación


This article is available in both English and Español

Compendio SciCheck

La Agencia Federal para el Manejo de Emergencias está enviando trabajadores médicos con contrato temporal a hospitales con escasez de personal, donde deben cumplir con los mandatos de vacunación contra el COVID-19. Pero mensajes en las redes sociales afirman falsamente que “doctores y enfermeros se ven obligados a renunciar debido a los mandatos” mientras que los trabajadores enviados por FEMA están “exentos”.


Historia completa

La Agencia Federal para el Manejo de Emergencias o FEMA, por sus siglas en inglés, coordina con otras agencias federales, tales como los Departamentos de Defensa y el de Salud, la respuesta a desastres catastróficos. Durante la pandemia del COVID-19, FEMA ha trabajado para identificar y hacer uso de personal médico adicional por petición de gobiernos territoriales, tribales y estatales. 

Pero mensajes de las redes sociales afirman sin fundamento que los trabajadores de FEMA están reemplazando a trabajadores no vacunados en hospitales con personal insuficiente y que no se les exige vacunarse.

Un mensaje en Facebook que se ha vuelto viral al ser compartido más de 350 veces, asegura que “¡Doctores y enfermeros que rechazan la vacuna están siendo despedidos porque su mera presencia cerca de pacientes sería una catástrofe sanitaria absoluta! PERO, sus reemplazos de Fema NO tienen que vacunarse… tiene muchísimo sentido”.

Pantallazos de tuits publicados en Instagram afirman igualmente que “¡DOCTORES Y ENFERMEROS SE VEN OBLIGADOS A RENUNCIAR DEBIDO A LOS MANDATOS BAJO UNA ADMINISTRACIÓN ESPELUZNANTE Y SOÑOLIENTA, PERO DOCTORES Y ENFERMEROS DE FEMA ESTÁN EXENTOS BAJO LA MISMA ADMINISTRACIÓN!”

Estos mensajes están equivocados por varias razones.

Primero, tal como hemos reportado previamente, el decreto emitido el 9 de septiembre por el presidente Joe Biden que exige a los empleados federales recibir una vacuna contra el COVID-19 abarca a todos los empleados del Poder Ejecutivo.  FEMA está adscrito al Departamento de Seguridad Nacional, el cual aparece como departamento ejecutivo en el Título 5, la sección del código legal estadounidense que rige el manejo de personal en el gobierno federal.

“Los empleados de FEMA tal como todos los empleados federales están obligados a vacunarse”, escribió el portavoz de FEMA, Nicholas Morici, en un correo electrónico enviado a FactCheck.org el 19 de octubre.

Los mensajes en las redes sociales también distorsionan el papel de FEMA en el apoyo que brinda para que los estados respondan a la pandemia del COVID-19. FEMA trabaja con otras agencias federales para identificar trabajadores médicos que puedan ser desplegados a centros asistenciales con personal insuficiente en todo el país, pero estos trabajadores no son empleados de FEMA.

“Estos trabajadores médicos enviados acatan la exigencias de vacunación y otras medidas preventivas … establecidas por el hospital receptor”, nos explicó Caitlin Justesen, jefa interina de prensa en FEMA, en un correo electrónico el 20 de octubre.

La agencia no cuenta con un equipo médico permanente, nos dijo en entrevista telefónica un representante de FEMA que nos pidió mantenerse en el anonimato. En cambio, FEMA y las otras agencias con las que trabaja tienen contratos con proveedores médicos que pueden ser reubicados temporalmente a áreas con necesidades asistenciales importantes. Estos proveedores médicos incluyen doctores, enfermeros, paramédicos, rescatistas y expertos en salud pública.

El representante de FEMA dijo que hasta el 14 de octubre, 917 funcionarios médicos a contrato trabajaban en 21 estados y un territorio, la mayoría de los cuales son personal clínico que apoya la atención a pacientes afectados por la propagación de la variante delta en áreas vulnerables.

FEMA también ha enviado más de 3.000 utensilios médicos claves, incluyendo ventiladores, cánulas nasales, máquinas de diálisis y reguladores de oxígeno, a estados con repuntes de COVID-19 desde julio.

Durante la semana del 19 de octubre, a pedido de FEMA, el sector del ejército estadounidense que está adscrito al Comando Norte (ARNORTH, por sus siglas en inglés) desplegó cerca de 40 efectivos militares médicos, incluyendo terapeutas respiratorios, doctores y enfermeros adscritos a la Armada estadounidense, a centros médicos en Spokane y Wenatchee, Washington, para apoyar en la atención a pacientes de COVID-19.

Otros nueve equipos de ARNORTH apoyan activamente la respuesta al COVID-19 en centros médicos y hospitales de todo el país, tres equipos en Luisiana, dos en Misisipi, dos en Alabama, uno en Idaho y uno en Tennessee.

Hospitales de todo el país enfrentan dificultades por la escasez de personal, exacerbada en parte por trabajadores que se han rechazado el mandato de vacunación contra el COVID-19 impuesto por Biden para aquellos que trabajan en la mayoría de dependencias sanitarias que reciben reembolsos de Medicare o Medicaid.

El mandato afectó a 17 millones de trabajadores sanitarios. Reportes indican que miles han sido despedidos o han renunciado antes que recibir la vacuna.

Según Justesen, FEMA no ha recibido solicitudes formales de gobiernos estatales para proveer apoyo médico adicional debido a escasez de personal ocasionado por personal que rehúsa vacunarse.

En Hawái, cerca de una docena de funcionarios médicos contratados por FEMA trabajaron en hospitales locales brindando tratamientos con anticuerpos monoclonales y vacunaciones durante la semana del 18 de octubre. Hawái ha experimentado escasez de personal de salud desde antes que empezara la pandemia, pero no hay intención de que estos trabajadores médicos temporales reemplacen a los empleados de tiempo completo.

“Los contratos de FEMA no buscan abordar vacantes en el personal; el personal pagado por FEMA solamente puede desempeñar trabajo relacionado al COVID-19 para aliviar la carga del personal médico actual”, escribió Adam Weintraub, director de comunicaciones de la oficina para el manejo de emergencias de Hawái, en un correo electrónico enviado el 25 de octubre a FactCheck.org.

Traducido por Luis Alonso Lugo.

Nota del editor: El Proyecto de Vacunación/COVID-19 de SciCheck es posible gracias a una beca de la Robert Wood Johnson Foundation. La fundación no tiene control alguno sobre las decisiones editoriales de FactCheck.org, y los puntos de vista expresados en nuestros artículos no reflejan necesariamente el punto de vista de la fundación. El objetivo del proyecto es aumentar el acceso a información precisa sobre el COVID-19 y las vacunas, y reducir el impacto de información errónea.